Luis Fernando Ortiz Daza
Bolivia con un índice de 0,662 según el informe del año 2015 de Desarrollo humano en América Latina, ocupa el puesto 16 entre 20 países solo por encima de Nicaragua, Guatemala, Honduras y Haití. Argentina y Chile muy por encima con un 0,836 y 0,832 respectivamente en los primeros lugares.
En cuanto al PIB per cápita en Sudamérica, Bolivia ocupa el último lugar entre 12 países con un ingreso de 6.530 dólares anuales, Chile, Argentina y Uruguay con 24.170, 21.924 y 21.387 respectivamente ocupan los primeros lugares. El PIB per cápita se obtiene dividendo el PIB entre la población.
A Chile le siguen en la región Argentina (22.375 dólares), Uruguay (21.719), Panamá (20,512), México (18,335), Venezuela (15,892), Brasil (15,690), Costa Rica (15,318), Colombia (13,794) y Perú (12,077).
Si bien es cierto que el crecimiento del PIB en términos cuantitativos ha crecido en un 5% promedio para Bolivia en los últimos 10 años, estamos lejos de alcanzar los parámetros de países desarrollados en la región en términos cualitativos.
En cuanto a términos de reducción de la pobreza se ha avanzado, Bolivia no podía quedar atrás y ha dado salto espectacular gracias a las políticas sociales de inversión pública del gobierno, bonos a los sectores más necesitados unidos al alza espectacular de las materias primas de los últimos años.
Así la brecha de pobreza en el período analizado cayó a tasas anuales elevadas y por encima de la tasa de pobreza en ocho países: Uruguay (-15,9%), Perú (-12,3%), Chile (-10,5%), Brasil, Ecuador, Paraguay, Colombia y Bolivia (entre un 8% y un 10% aproximadamente).
En Honduras, México y Venezuela la tasa de pobreza se elevó a un ritmo anual de entre un 2% y casi un 5%.
CRECIMIENTO ECONÓMICO
Según los pronósticos, en la región se registrará una contracción del 1,3 % en 2016 tras una disminución del 0,7 % en 2015, la primera vez en más de 30 años que se registra una recesión en dos años consecutivos. El producto de la subregión de México y América Central, y del Caribe, respaldado por los vínculos con los Estados Unidos y las sólidas exportaciones, aumentaría un 2,7 % y un 2,6 %, respectivamente, en 2016, y más aún en 2017 y 2018. El pronóstico para Brasil indica una contracción del 4 % en 2016 y se prevé que la recesión continuará en 2017.
En Sudamérica, Bolivia liderará el crecimiento en 2016, aunque no tan espectacularmente como para pagar un segundo aguinaldo, es evidente la reducción de ingresos por la caída de los precios del petróleo y el presidente, no tuvo más que reconocer que es muy posible un crecimiento menor al 4,5%.
SALUD
Un indicador insoslayable para evaluar el grado de éxito del sistema de salud de un país es la esperanza de vida de la población. Es imposible que las personas vivan muchos años en una nación con una infraestructura sanitaria precaria. Por el contrario, cuanto mejor sea esta, y mayores los cuidados que pueda brindar a los ciudadanos, más probable será que vivan más.
Chile es el país con mayor esperanza de vida de América Latina. En promedio, la gente vive allí 80 años, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En un segundo lote, con 79 años de media, se encuentran Colombia, Costa Rica y Cuba.
El que está peor ubicado es Haití, con apenas 62 años, 18 menos que Chile, lo que da una idea de la enorme disparidad que existe entre los países de la región. También están mal Bolivia (68 años), Guatemala (72) y El Salvador (72).
Otro indicador trascendental es la mortalidad infantil, En este rubro el que está a la cabeza es Cuba. Según la OMS, la probabilidad de morir antes de los cinco años es de 6 cada 1.000 nacidos vivos. En segundo lugar está Chile, con 8, y luego viene Costa Rica, con 10.
Nuevamente, el que está en una situación más delicada es Haití, con 73 cada 1.000. Bastante lejos, pero igualmente en malas condiciones, están Bolivia (39) y Guatemala (31).
EDUCACIÓN: BOLIVIA AL MARGEN DE LAS MEDICIONES INTERNACIONALES
Recientemente, la Unesco ha presentado los resultados de la evaluación educativa de 2013 en América Latina y el Caribe, abarcando casi todos los países de la región, con la notable excepción de Bolivia, Cuba, El Salvador y Venezuela. La calidad educativa es actualmente el mayor reto de las naciones. De ello depende que estén o no preparadas para la revolución tecnológica y la economía del conocimiento y, por tanto, para avanzar en la senda de la prosperidad.
Ante Este panorama, no hay lugar para el optimismo si seguimos con la actual política de gastos del gobierno central y la nula inversión en desarrollo productivo de las gobernaciones. Se han reducido los ingresos, ha caído el PIB y aumenta el déficit y queremos construir mega estadios y seguimos con gastos de efeméride patrias trasladando gente a las regiones como a Tarija para una sesión del congreso que no sabemos cuánto cuesta en hoteles de lujo, viáticos y refrigerios. Los viajes del presidente son excesivos a la par que los del vicepresidente en eterna campaña.
Hoy hay que amarrase los cinturones y ser austeros, no puede ser que gastemos nuestros ahorros para forzar cifras de crecimiento económico, nadie como padre de familia me va a creer porque tengo un Ferrari que estoy muy feliz mientras no tenga trabajo. Nadie es tan tonto como para creer que vivo en la opulencia si gasto los ahorros de mis hijos que en principio fueron para educación y salud y voy a hoteles lujosos y restaurantes de cinco estrellas. Eso es lo que hace este gobierno con estadios y coliseos, con plata para el fútbol y circo de las concentraciones masistas.
Con datos de CEPAL, UNESCO, ONU,FMI, Banco Mundial, OMS.