Una vara en nuestras manos podrá ahuyentar a un can furibundo.
En las manos de Moisés hizo que las aguas del mar se separaran.
Depende de quién son las manos…
Una honda en nuestras manos es tan solo un juguete.
En las manos de David fue un arma potente.
Depende de quién son las manos…
Dos pescados y cinco piezas de pan en nuestras manos son unos emparedados.
En las manos de Jesús alimentaron a una multitud.
Depende de quién son las manos…
Unos clavos en nuestras manos serán suficientes para reparar una silla.
En las manos de Jesucristo trajeron salvación al mundo entero.
Depende de quién son las manos…
Como podrás ver por todo lo escrito líneas arriba, depende de quién son las manos…
así que, coloca tus aflicciones, tus preocupaciones, tus temores, tus anhelos,
tus sueños, tus logros, tu trabajo, a tu familia y a tus relaciones personales en las grandes manos de Dios.