(ERBOL) El ministro de Gobierno, Carlos Romero, informó este martes que los exabogados de Gabriela Zapata, Walter Zuleta y William Sánchez Peña, solicitaron hace una semana, refugio político a Perú, para ponerse a buen recaudado, luego de haber sido visto en Lima por investigadores bolivianos.
De acuerdo al procedimiento interno, la solicitud de refugio debe resolverse en las próximas tres semanas. Entre tanto, Bolivia ha solicitado al Ministerio del Interior rechazar el pedido de los abogados y más bien cumplir con el mandamiento de aprehensión emitido por la Fiscalía General de Estado, tomando en cuenta que tanto Zuleta y como Sánchez no se encuentran en situación de persecución ni cosa parecida.
“No conozco los términos de la solicitud. Si en caso se declararan perseguidos políticos, sería muy poco serio porque ellos debían presentarse ante la justicia para aportar información del caso Zapata y en esa circunstancia abandonaron el país. Entonces es gente que tiene problemas con la justicia y no con el poder político”, manifestó.
Explicó que también pidieron verificar el ingreso de ambas personas a territorio peruano que, al parecer fue ilegal, porque no registraron salida en el Servicio de Migración boliviano.
Dijo que si bien hay orden de captura internacional, la misma no puede ser ejecutada por investigadores bolivianos, porque no tienen potestad de actuar en jurisdicción extranjera. La orden de captura debe ser activada por Interpol en coordinación con la Policía peruana, explicó.
Indicó que para el efecto, se contactó con el ministro del Interior José Luis Pérez Guadalupe, para solicitar colaboración, dado que Zuleta y Sánchez fueron vissualizados en la ciudad de Lima.
Romero informó que su colega peruano se comprometió a realizar un estudio jurídico para prestar la colaboración del caso, pero la limitación está en la decisión de las autoridades peruanas.
El ministro dijo que no tiene información sobre el paradero de la exdiputada de Unidad Nacional (UN) Cynthia Perou, quien fugó hacia el mismo país, tras ser descubierta que visitó siete veces a la expareja de Evo Morales, Gabriela Zapata, y en esa condición era investigada por la Fiscalía de La Paz.