Redacción Central/Bolinfo
(elPeriódico-febrero 25/2019) La Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood celebró la edición número 91 de los premios Óscar en el Dolby Theatre de Los Ángeles, en reconocimiento a las mejores producciones y los artistas más destacados del séptimo arte.
La ceremonia, que por primera vez en 30 años no contó con un conductor, premió a Green Book o el Libro Verde como mejor película, a pesar de que todos los pronósticos indicaban que la mexicana Roma se alzaría con la estatuilla más importante.
De todas formas, el largometraje de Alfonso Cuarón Orozco de 57 años le dio a México sus primeras estatuillas, al consagrarse en las categorías de mejor película extranjera, mejor fotografía y mejor dirección.
La británica, Olivia Colman de 45 años, ganó como actriz protagónica por su trabajo en The Favourite o La Favorita, mientras que el estadounidense, Rami Malek de 37 años hizo lo propio en la terna masculina por su labor en Bohemian Rhapsody, película que rinde homenaje a la figura de Freddie Mercury (1946-1991+), líder de la banda británica Queen.
Mejor película
Green Book es la ganadora del Oscar 2019 a mejor película. El filme dirigido por el director estadounidense Peter Farrelly de 62 años ha sido reconocido como el mejor largometraje del año por la Academia.
Green Book ha dado la sorpresa y se ha llevado el premio a la mejor película de los Óscar. Cuando todo el mundo pensaba que sería Roma o La Favorita, Green Book ha dado la campanada.
Dirigida por Peter Farrelly, está ambientada en los años 60 y cuenta la historia de Tony interpretada por el actor estadounidense Viggo Mortensen de 60 años, que es contratado como chofer para llevar a Don Shirley, interpretado por Mahershala Ali de 45 años, un pianista negro, a su gira de conciertos.
No será una gira cualquiera ya que tendrán que seguir el libro verde, la guía donde se aceptaban a los afroamericanos. Es una película donde se ve el racismo y los prejuicios de la época.
Furor en México por Roma
La Secretaría de Cultura de la Ciudad de México se encargó de instalar al menos dos puntos en calles de la capital para seguir en vivo la entrega de los premios Óscar.
Este domingo 24 de febrero los capitalinos siguieron de cerca la ceremonia en la que la película Roma de Alfonso Cuarón ganó tres estatuillas: Mejor Fotografía, Mejor Película Extranjera y Mejor Director.
A un costado del Monumento a la Revolución, en la zona centro de la capital, se reunieron centenares de personas desde las 14:30 horas para disfrutar de música en vivo y bailar al son de la cumbia con bandas como Sonido Gallo y Las Luz y Fuerza.
Durante la fiesta llamó la atención una quinceañera que llegó para que la retrataran junto a los vehículos antiguos que salieron en el filme.
A partir de las 19:00 horas se empezó a transmitir la ceremonia de los premios en tres pantallas gigantes, y los asistentes del «Roma Fest» se sentaron en el piso para escuchar los veredictos de la academia.
Los gritos y aplausos sacudieron la Plaza de la República cuando se anunció que «Roma» había ganado en la categoría a Mejor Película Extranjera.
Durante la entrega de los premios Alfonso Cuarón mandó un mensaje para todos los que se encontraban en el monumento a la revolución: «Muchas gracias por estar ahí».
«Roma» es la historia de Cleo, una empleada doméstica de origen mixteca en Ciudad de México. Es la historia de la vida real de Libola Rodríguez, la mujer que cuidó desde niño a Cuarón y a quien está dedicado este retrato íntimo sobre la relación entre una familia de clase media alta con sus empleadas indígenas.
elApunte
El mejor director
Estaba cantado, Alfonso Cuarón se llevó el Oscar a la mejor dirección por la película Roma.
Un film creado en Netflix y estrenado en la misma plataforma digital. Un éxito para Netflix como pionera en recibir un Oscar en la categoría de mejor director.
Cuarón es, sin duda, uno de los mejores cineastas mexicanos en una generación top que comparte con Guillermo del Toro de 54 años o con Alejandro González Iñárritu de 55.
Este es el segundo Oscar que recibe. El primero fue el que consiguió por Gravity, siendo el primer mexicano en ganar un Oscar como mejor director.