ANDRÉS TÓRREZ TÓRREZ
Sin una solución clara y con grupos cada vez más divididos, se cerró la jornada del viernes, dentro de la crisis que atraviesa la F.B.F. ente rector del fútbol nacional, donde se imponen las amenazas de uno y otro lado, las que obviamente agudizarían el problema.
La jornada del viernes se inició con otro intento de limar asperezar entre los disidentes y el Presidente César Salinas, que a su retorno, informó que todo estaba aceptado menos el descenso de Destroyers, con la mentira piadosa de que podrían incorporarse a la reunión del Consejo Superior, con la presencia de los 8 equipos oficialistas y al amparo de Art. 23 del Reglamento del Estatuto, por no reunir los 2 tercias.
Seguimos atentamente el desarrollo de la reunión, por la transmisión de Late, donde durante 3 horas se trataron algunas pichangas, como los seguros para los clubes, árbitros, el calendario deportivo y la Convocatoria de los Campeonatos Apertura y Clausura 2020, determinándose arrancar el 18 de enero.
Ambos campeonatos se jugarán en el sistema de todos contra todos y la única novedad sugerida por el Comité de Competiciones, que el cupo de Bolivia 2, se defina entre los sub-campeones del Apertura y Clausura
A la finalización de la reunión el portavoz federativo Ángelo Pórcel, confirmó que el campeonato arranca el 19 de enero con o sin los equipos disidentes, en caso de que no se registran hasta el miércoles 15 de enero.
Añadió el portavoz que “No se procedió al sorteo del fixture del Apertura porque desde el lunes hasta el miércoles se procederá a la inscripción (de clubes) para que tengan derecho de participar en el torneo local e internacional”.
Apenas unos minutos después el grupo de los disidentes, que al aparecer se encontraban por las inmediaciones a la reunión, descalificaron por no contar con los 3 tercios de los clubes como establece la norma y categóricamente señalaron que ninguno (de los clubes) se presentaría al inicio del Apertura, “Los presidentes y delegados de los clubes firmantes señalamos que no asistiremos a ninguna convocatoria a campeonatos hasta que se retomen los mecanismos legales y el cumplimiento de la norma”, indica entre sus partes más sobresalientes.
Hay que recordar que la crisis dirigencial se inició por la determinación del Comité Ejecutivo de la F.B.F. de decretar el descenso directo de Destroyers, lo que mereció la adhesión de 6 clubes, los 4 cruceños más Bolívar y Wilstermann, mientras el descendido pedía jugar el indirecto con Real Santa Cruz, que se benefició de la situación con el ascenso directo.
Lo anecdótico es que el tema del descenso, no está cerrado ni mucho menos luego de que en la víspera se informara que el TDD (Tribunal de Justicia Deportiva) de la F.F.B. determinó aceptar la demanda de Bolívar contra Aurora, por el partido que jugaron el pasado 15 de diciembre.
En la ocasión Aurora se presentó con 11 jugadores juveniles, que perdían 5 a 0 en el primer tiempo y en el segundo tiempo regresaron sólo 6, por lo que el partido fue suspendido, según el Art. 37 del Código Disciplinario, establece una sanción de 9 puntos, que podría dejar en el último puesto de la tabla acumulada del descenso a Aurora y salvaría a Destroyers del descenso directo.
Sin embargo el problema es que muy probablemente el fallo del TDD, recién se conocería dentro de 2 semanas y el campeonato como sabemos se iniciará la próxima semana, en todo caso más leña al fuego parece agregar a la crisis a todo nivel del fútbol boliviano.