Violeta Castillo/Bolinfo/Tarija
(elPeriódico-marzo 9/2019) Activistas del colectivo Ni Una Menos estuvieron ayer presentes en el Tribunal Departamental de Justicia para hacer el seguimiento a las audiencias de dos casos de violencia, en la oportunidad, cuestionaron la problemática de la retardación de justicia a la que son sometidas las víctimas como sus familias.
Uno de estos casos, es el feminicidio de Claribel Sánchez Tarifa, quien salió a trabajar, pero fue encontrada muerta el 2015 presuntamente a manos de su exnovio, Mauro Díaz.
Sin embargo, el juicio fue suspendido en reiteradas oportunidades y hasta la fecha no se cuenta con una sentencia.
“Acompañamos a la familia de Claribel en su peregrinaje de cuatro años por justicia (…) es un largo camino el que debemos recorrer, parte de ese camino le corresponde a los fiscales y a los jueces”, indicó Gabriela Alfred.
La segunda audiencia corresponde a una tentativa de feminicidio en que el principal sospechoso se encontraba prófugo desde el año 2018.
Este hombre habría intentado asesinar a su pareja apuñalándola.
“Por lo menos se necesita una respuesta de la justicia que castigue a los responsables. Es una llamada de atención para todo el sistema de justicia (…) aunque no hay ninguna respuesta que devuelva la vida a las casi cuarenta mujeres víctimas de feminicidio en el departamento”, refirió la representante de este colectivo, Alba Van der Val. (eP).
