SARANSK
Felipe Baloy inmortalizó su nombre en el futbol de su país al marcar el primer gol panameño en una Copa del Mundo, y ahora el veterano central y toda Panamá reman para despedirse el jueves con una victoria frente a Túnez.
Las dos goleadas anteriores, ante Bélgica (3-0) e Inglaterra (6-1), quedaron atrás y el conjunto dirigido por el colombiano Hernán Darío Gómez ansía apuntarse los tres puntos en el último compromiso de un Mundial que la nación centroamericana ha disfrutado con intensidad.
En realidad, desde que los panameños conocieron la conformación de los grupos, se hicieron a la idea de que la ruta sería sumamente compleja al toparse con Bélgica e Inglaterra, pero anidaron la esperanza de que su selección le sacase un buen resultado a Túnez.
Túnez tiene, empero, más recorrido que Panamá en citas mundialistas, cinco en total, y en Rusia ha sido un equipo mucho más competitivo que su rival del jueves. Inglaterra le ganó 2-1 con un gol sobre el final, aunque Bélgica la vapuleó 5-2.
La escuadra africana también busca su primer triunfo desde su estreno en la Copa del Mundo de 1978.
El «Bolillo» Gómez tampoco se quiere marchar con un cero en la casilla esta vez. Aunque no pudo clasificar a la segunda ronda a las dos anteriores selecciones que dirigió en un Mundial, Colombia en 1998 y Ecuador en Corea-Japón 2002, al menos ganó un partido en cada uno de esos torneos.