Los controles que realiza el Gobierno Municipal de Tarija en cuanto a los infractores que exceden el ruido permisible, reveló que un 25 por ciento de los motociclistas no cumple con las normas
LORENA PÉREZ/BOLINFO/TARIJA
(elPeriódico, junio 28/2018) Los ruidos que exceden los límites permisibles y que se perciben en la ciudad de Tarija, pueden causar grandes daños en la salud, tanto física como emocionalmente.
El administrador del Centro de Revisión Técnica Vehicular de la Alcaldía, Juan Carlos Camacho, informó que a través de la Secretaria de Movilidad Urbana, este centro, inició una campaña de concientización sobre el nivel de ruidos.
“Asistimos a una defensa de tesis de una estudiante y está comprobado que la motocicleta, es el motorizado que más ruido genera en nuestra ciudad; desde ahí nació esta planificación, por lo que estamos haciendo cumplir la normativa de ruidos”, explicó.
La Ley Nº 1333 del Medio Ambiente, publicada el 27 de abril de 1992, especifica en su artículo 42, que el Estado, a través de sus organismos competentes, establecerá, regulará y controlará los niveles de ruidos originados en actividades comerciales, industriales, domésticas, de transporte u otras a fin de preservar, mantener la salud y el bienestar de la población.
Según la Resolución Municipal Nº 083/2011, el máximo permisible en cuanto motocicletas, no debe superar los 84 decibeles y la sanción correspondiente a esta infracción, es de Bs 100 a Bs 300.
En la campaña de concientización “Por una vida sin ruidos molestos”, ejecutada por el Gobierno Municipal de Tarija, se midieron alrededor de unas 3 mil motocicletas, según Camacho, de las que, un 25 por ciento infringe la norma
“Los infractores, son motociclistas que generan –con sus motorizados- desde los 90 a 100 decibeles, en muchas ocasiones, los jóvenes abrieron sus escapes o compraron otro adaptado a su motocicleta, porque a ellos les gusta el ruido”, aseveró.
El funcionario, señaló que la juventud que infringe la norma de ruidos, no se está dando cuenta que están generando grandes daños en su salud, crean un malestar en la ciudadanía.
“Ni qué decir de las personas enfermas que se encuentran hospitalizadas, están durmiendo y ese nivel de ruido despierta a cualquiera; todavía podemos decir que la ciudad de Tarija es tranquila y que no hay un nivel de ruido exagerado”, analizó el funcionario.
Esta campaña, según Camacho, es constante y realizada durante todo el año en puntos estratégicos de la ciudad, especialmente, donde existe un mayor flujo de motocicletas, además ejecutan a pedido de presidentes barriales.
“Hay presidentes de barrio que denunciaron que estos jóvenes están molestando en las plazas y asistimos para atender estos casos”, aseguró.
Por su parte, el médico especialista en otorrinolaringología, Álvaro García Arce, aseguró que cualquier tipo de ruido que supere los 70 decibeles, puede dañar el sentido del oído.
“Los sonidos agudos son más dañinos y la exposición diaria frecuente, es casi seguro que lesiona las células de la audición generando un daño irreversible”, explicó.
García, afirmó que la pérdida de audición, generalmente está asociada al ruido que se escucha en forma permanente, se denomina acufeno o tinitus.
“Las motocicletas contaminan el ambiente con ruido o contaminación acústica, no es lo mismo a las 04.00 horas que a las 12.00 horas, cuando en el ambiente hay 30 o más decibeles de ruido permanente afectando a todas las personas”, acotó.
El médico especialista, aseveró que destruir los escapes de las motocicletas, no es una solución; se debe multar a quienes exceden el nivel permisible.
“En las ciudades adelantadas, incluso tocar la bocina de un vehículo a cada rato está prohibido”.
Unas 19.078 motocicletas circulan en la ciudad de Tarija
Según el informe del Registro Único para la Administración Tributaria Municipal (RUAT), correspondiente a octubre del 2017, en la ciudad de Tarija circulan unas 19.078 motocicletas registradas.
Este informe fue proporcionado por el Centro de Revisión Técnica Vehicular de la Alcaldía de Tarija, en donde se refleja que el parque automotor clasificado por clase y servicio, unas 18.289 motocicletas son de uso particular y 789 de uso oficial.
Un sondeo a diferentes centros comerciales que se dedican a vender motocicletas, reveló que algunas marcas de origen chino que fabrican este tipo de vehículos, ya llegan a la ciudad con un escape que genera un ruido superior a los 84 decibeles.
“No podemos hacer nada si ya llegan así, pero aconsejamos a nuestros clientes el cambio del escape a uno menos ruidoso, y en la mayoría de las tiendas, el cambio es gratuito”, reveló el propietario de una tienda de motocicletas, quien prefirió mantener su nombre en reserva.
Al respecto, el administrador del Centro de Revisión Técnica Vehicular, Juan Carlos Camacho, señaló que los infractores hicieron notar este “problema”, por lo que las campañas de controles de ruidos, son coordinadas con la Dirección de Ingresos de la Alcaldía, el ente que se encarga de brindar la placa de circulación a los motorizados.
“Actualmente, estamos trabajando en un reglamento y hemos pedido que antes que se emita la placa de circulación, se instruya a los propietarios de motocicletas a pasar por nuestro centro y cuenten con su certificado de ruidos que avalen que ese motorizado puede circular por el radio urbano, además que cumpla con los decibeles permitidos”, indicó.
Este reglamento, aún continúa en proceso de elaboración, según Camacho, de igual manera, aseveró que los jóvenes infractores, usualmente, desconocen del nivel de decibeles permitidos para circular en la ciudad.
La Aduana Nacional, es la institución encargada de verificar el ingreso de motorizados en Bolivia; Camacho, indicó que dicha entidad, no controla en nivel de ruidos que puede generar un vehículo, especialmente, las motocicletas.
“Esto partiría de una política nacional. Si algún propietario compra una motocicleta de competición, entonces solo debería sacarla para eso”, señaló.
Al margen de que una motocicleta llegue de fábrica con un ruido que supera lo permitido, el funcionario, señaló que existen unos dispositivos “silenciadores”, que tienen un costo de unos 100 a 150 dólares.
Policía
El Comando Departamental de la Policía realizó una serie de controles para disminuir los índices de contaminación acústica.
Este control, determinó que el ruido en el centro de la ciudad sobrepasaba los decibeles permitidos; pese a los controles, el problema continúa latente, especialmente cuando se refiere a los motorizados.
Otro problema es de los motociclistas, según explicaron desde el Comando Departamental de la Policía, que pese a los controles realizados, continúan sacando el escape a las motocicletas para que causen un gran ruido.
El ruido se constituye en un problema en la salud, es por ello que debe tomarse en cuenta los principales problemas de salud que pueden causar. (eP).
elAPUNTE
Efectos de los ruidos en la salud
Las causas que pueden generar en la salud de las personas, el constante ruido de diferentes objetos, tanto de vehículos como de alarmas, escapes de motocicletas, bocinas, entre otros, son diversos, pudiendo afectar la actividad cotidiana del ser humano.
Dificultad para dormir. El ruido dificulta conciliar el sueño, despertarse repetidas veces, menor profundidad del sueño, incrementa la presión sanguínea y los latidos fruto de los sobresaltos con los efectos del día siguiente como fatiga, mal humor, entre otros.
En la salud mental, puede causar efectos diversos como ansiedad, estrés, nauseas, dolor de cabeza, inestabilidad, cambios de humor, irritabilidad y desordenes psiquiátricos.
Efectos en el vecindarios; los ruidos en los barrios generan molestia, mal humor, agresividad, decepción, impotencia, depresión, ansiedad, distracción, agitación, cansancio, alteración del comportamiento, quejas y conflictos.
Todos estos problemas mencionados, según el Comando Departamental de la Policía, deben llevar a la población a la reflexión y a buscar un verdadero cambio de actitud, porque la normativa está vigente, pero lo que hace falta es la conciencia ciudadana para cumplirla.
losDATOS
Según la Resolución Municipal Nº 083/2011, el máximo permisible en cuanto motocicletas, no debe superar los 84 decibeles y la sanción correspondiente a esta infracción, es de Bs 100 a Bs 300.
NOTA DE APOYO
Instan a dueños de motocicletas a verificar sus escapes
El administrador del Centro de Revisión Técnica Vehicular, Juan Carlos Camacho, invitó a las personas que adquieran una motocicleta, a pasar por este centro con el objetivo de realizar la medición correspondiente a los motorizados y verificar si cumple con las normas de ruido.
“Hacemos esto de forma gratuita; posterior a la revisión, dotamos al dueño de un certificado de ruidos y le otorgamos una roseta que tiene validez de un año para que pueda circular por el radio urbano”, aseveró.
En caso de que una motocicleta, no cumpla con los niveles de ruido permitido, el Centro de Revisión Técnica Vehicular, procede a elaborar un informe de recomendaciones técnicas para que asista a un mecánico o se solicita que cambie el escape.
Según Camacho, el costo de un mantenimiento de un escape en los mecánicos, es de Bs 60 a 80.
El escape de una motocicleta con el transcurso del tiempo, desgasta una fibra interna, por lo que el mecánico cambia esta fibra, lo que reduce el ruido.
“Los que sobrepasan el límite de ruido, obtienen una notificación verbal con un plazo de 15 días para reducir su nivel de ruido, en una segunda oportunidad, la notificación es escrita y a la tercera, ya podemos sancionar a los propietarios con una multa”, afirmó el funcionario.