REDACCIÓN CENTRAL/ BOLINFO/ TARIJA
(elPeriódico marzo 11/2018)
Quien viene de otro lado encuentra una ciudad pintoresca, bonita, que atrae, Tarija tiene lo suyo y quien nos visita lo descubre rápidamente. Es cierto que de un tiempo a esta parte se ha descuidado el mantenimiento de sus calles, sus jardines y también su limpieza, pero son situaciones que se pueden subsanar.Pero… lo que también notan quienes llegan a esta tierra, es que hay más perros que personas, la cantidad de canes deambulando por las calles sorprende y hasta asusta. En algunos lugares son jaurías enteras, mientras más alejado del centro es el barrio, más perros uno encuentra. Hay un descuido absoluto en este aspecto y claro que da una muy mala impresión. Tal vez nosotros no lo notamos pero es así, una fea realidad. El problema de los canes vagabundos no sólo radica en la imagen que dejan sino en los riesgos que significan, muchos son agresivos y atacan a la gente pudiendo transmitir enfermedades como la rabia, otros cruzan calles y avenidas y provocan accidentes de vehículos que dejan saldos de heridos. No existen políticas municipales para controlar este fenómeno que trastoca la vida de los ciudadanos y al parecer no existirán, escuchamos a veces que se propone la aniquilación de perros lo que es rechazado no sólo por grupos ambientalistas sino por la población en general. También se escucharon propuestas para controlar la reproducción pero no se han visto acciones ni resultados concretos. Sin duda que gran responsabilidad tenemos quienes somos dueños de estos animalitos que por su cariño y lealtad se han convertido en nuestros mejores amigos.Se dice que la población perruna sobrepasa por mucho la humana, lo que nos debe hacer pensar seriamente. Es hora de trabajar en un plan de control que evite que esto siga sucediendo, el municipio tiene la palabra.