AGENCIAS
A menos de un mes para el debut en la Copa Libertadores (Conmebol), Oriente precisa un arquero con suma urgencia, luego de que la continuidad de Romel Quiñónez es casi imposible, pues Bolívar anunció que debe volver a La Paz, salvo que haya una buena oferta. Es por eso que la dirigencia albiverde tiene todo acordado con Diego Zamora, otro portero de la academia que ya tiene un par de años jugando en primera división.
La prioridad es Quiñónez, pero todo apunta a su regreso al plantel celeste, así lo informó Marcelo Claure, presidente de Baisa (empresa que administra el club Bolívar), salvó que la institución que lo quiera haga una “muy buena oferta”, algo complicado para Oriente, pues Romel es un arquero de jerarquía y vale lo que pesa y, por ahora, no entra en presupuesto.
De esa manera, la apuesta de los refineros es buscar una solución inmediata. Es así que acordó todo para la incorporación de Zamora, que jugó en Nacional Potosí, San José y también en la academia paceña, aunque no pudo consolidarse.
Otro que está en la mira es Rodrigo Banegas, que fue el segundo arquero de Nacional Potosí durante la última temporada.
Sin embargo, como lo que se viene es la Libertadores, Oriente no quiere arriesgar nada, por eso es que también contratará un arquero extranjero sí o sí. Es más, se sabe que el meta que vendrá para defender a los albiverdes el 22 de enero ante Universitario, de Perú, es de nacionalidad paraguaya, donde milita en un equipo de primera división.