ERBOL
El canciller de Chile, Heraldo Muñoz, calificó como un “insulto” y un “acto propagandístico fallido” a la denuncia boliviana que se planteó este miércoles ante el Consejo Permanente de la OEA, sobre violencia y tortura contra los nueve funcionarios detenidos en Chile por luchar contra el contrabando.
Los ministros de Relaciones Exteriores y Justicia de Bolivia denunciaron ante los embajadores de la OEA que los nuevo bolivianos (dos militares y siete aduaneros) sufrieron una detención “arbitraria e ilegal, bajo hostigamiento y agresión, con uso excesivo de violencia e incluyendo disparos de amedrentamiento con serios indicios de tortura”
Para Muñoz, “es un insulto hablar de torturas a un país como Chile que conoce bien lo que fue la tortura. Más de 35 mil torturados y presos políticos”.
“Que se haga propaganda con eso, yo creo que representa la falta total de credibilidad de este gobierno boliviano, que no nos asombra casi nada de lo que dicen, pero aparentemente todos los días intentan superarse”, manifestó el canciller chileno citado por Emol.
Ante la OEA, la delegación boliviana expuso fotografías de las heridas de los detenidos y pidió apoyo para lograr la liberación de los nueve detenidos mediante la vía diplomática. El ministro Arce solicitó incluso a Chile que abra un diálogo para solucionar este tema, sin embargo, para Chile el intento boliviano no tuvo repercusión en el foro.
“Que Bolivia haya intentado llevarlo al Consejo Permanente de la OEA y no haya tenido ningún eco, revela que esto fue un acto propagandístico fallido», reiteró”, señaló Muñoz.
No obstante, el embajador de Haití, Jean-Víctor Harvel, que presidió la sesión de la OEA, solicitó a nombre de los presentes en la reunión que Bolivia y Chile agoten los mecanismos diplomáticos y tradicionales para solucionar este tema.
El canciller de Chile recalcó la posición de su gobierno de que el caso de los nueve detenidos está en las manos de la justicia.