En Tarija ciudad, toda nuestra basura va al mismo lugar no importa de donde venga ni qué origen tenga. Vidrios, metales, plásticos, papel, comidas, líquidos,pilas o baterías, etc son tratados por igual en una espantosa y letal política de “no discriminación”.
En décadas no se han generado las condiciones para tratar de manera distinta esos desechos que por sus características implican mayor o menor riesgo para la población. En décadas no tenemos un botadero moderno, tecnológicamente preparado
Uno de los descuidos más grandes y lamentables sin duda consiste en no haber inculcado a generaciones enteras ese sentimiento de protección de nuestro medio ambiente, no hacer educado a la población a cuidar “su casa”, la única que tiene, a comprender que no se puede vivir “desportillando” nuestro hábitat porque es un atentado contra nosotros mismos. Las autoridades de turno en una frenética carrera por ganar “puntos políticos” creen que construir selvas de cemento consolidara su liderazgo pero no analizan a costa de que, correr detrás del éxito electoral olvidando que en su paso caen arboles, bosques y ecosistemas enteros que conviven con nosotros y que no serán restituidos.
Contribuimos con distintas actitudes a impulsar el consumismo vigente en la sociedad, nos hemos convertido en depredadores por excelencia de los mercados pero también de la naturaleza, generamos miles de toneladas de basura por día, la dejamos por doquier, en cualquier momento. Usamos el planeta como un gran basurero. Nuestro mal comportamiento ambiental es un tema de debate que abordaremos en su momento con mayor amplitud. Preocupa sobre todo la responsabilidad de nuestras autoridades sobre el destino que se les da a nuestros desechos, existen sociedades que están aprendiendo que esto no puede continuar y se han ido educando para cambiar de rumbo.
Restarle importancia a quienes hablan de cuidar el medio ambiente creyendolos“yatiris”