Noticias El Periódico Tarija

Cultura Colectiva

Si ellas hubieran sabido antes que el protector solar era necesario, ninguna se hubiera expuesto al sol de esa manera.

El cáncer de piel ocupa el segundo lugar en frecuencia en México; anteriormente era común que personas mayores de 50 años sufrieran esta enfermedad (debido al tiempo de exposición al sol que habían tenido durante tantos años). Hoy es posible que desde los 18 años hombres y mujeres desarrollen este mal. Cada año se diagnostican dos millones de nuevos casos en todo el mundo, según datos de la Organización Mundial de la Salud. Lo inaceptable es que el padecimiento vaya en aumento a partir de la desinformación; es decir, la mayoría de la personas que hoy necesitan un tratamiento para curar un cáncer de piel tipo Melanoma, no sabían que necesitaban usar protector solar o que debían reducir las horas que se exponían al sol todos los días.

«Si hubiera sabido…», así comienzan los más terribles finales de muchas historias. Por ello, queremos proporcionarte una lista sencilla y completa de todo lo que debes saber si tienes la intención de comenzar una dieta, rutina de ejercicio o tratamiento para bajar de peso. Evita hacerle daño a tu cuerpo, toma precauciones y asegura el éxito del proceso que elijas para recuperar tu figura a través de 8 cosas que debes saber antes de comenzar tu reto.

8. La comida «saludable» (ingredientes o recetas recomendadas en la mayoría de las dietas) también contiene calorías. El hecho de comer o preparar recetas a base de alimentos con gran cantidad de nutrientes no significa que puedas ingerir cantidades descomunales. Absolutamente todo lo que llega a tu estómago tiene cierto contenido calórico que, en algún momento, se acumulará en tu cuerpo. Así que además de comer lo más sano posible, debes poner atención en las cantidades que consumes.

7. El número que la báscula te indica no lo es todo, revisa si tu ropa te queda distinta. Si la sientes igual de ajustada, tal vez algo está fallando; si te es más fácil abrocharte los jeans o tu blusa no se entalla tanto a tu cintura y abdomen, definitivamente estás obteniendo resultados. No importa si la báscula no lo marca, tal vez estás reduciendo tallas en lugar de bajar de peso y ese también es un gran logro.

6. Siempre ten en mente que la cirugía estética es la última opción. Estos procedimientos pueden trasformar por completo tu apariencia, pero se trata de un recurso que sólo debe ser tomado en cuenta cuando no hay otra alternativa. Por ejemplo, para personas con alguna enfermedad derivada de su obesidad; mientras ese no sea tu caso hay muchas otras formas de bajar de peso que no son una operación.

5. Debes aprender a controlar el estrés para no sabotearte en momentos de debilidad. El cortisol que se genera en tu cuerpo a través de la hormona del estrés engaña a tu cerebro pidiéndole glucosa, es decir, alimentos dulces. Lo que nadie sabe es que entre más azúcar consumas, más te exigirá tu paladar durante momentos de ansiedad o depresión; así que evita los carbohidratos simples a toda costa cuando te sientas tensa.

4. Asegúrate de no estarte convirtiendo en una skinny fat, este termino se refiere a las mujeres que –a pesar de estar en su peso promedio– guardan grasa adicional alrededor de la cintura y órganos internos. La razón por la que esto sucede se debe, principalmente, a malos hábitos alimenticios y sobre todo a un sedentarismo. Si eres delgada pero notas algo de grasa en el área del abdomen, sólo debes reducir el consumo de refrescos, harinas y aderezos, además de agregar una rutina ligera de ejercicios a tu semana.

3. Las píldoras para perder peso funcionan, pero las consecuencias de tomarlas y el rebote que provocan al dejar de usarlas es grave y –en ocasiones– irreversible. En primer lugar, no debes tomar nada que no sea prescrito por un médico y, en segundo, depende de tus características fisiológicas que estos medicamentos no te causen ninguna afección física o química. Por lo tanto, las pastillas para pajar de peso son una de las peores opciones.

2. Nunca es tarde para comenzar y no importa las veces que te equivoques. Debes estar consciente de que una dieta o una nueva rutina de ejercicios no es cosa fácil, todo comienzo es complicado y, sobre todo, pesado. Se constante y no te castigues si flaqueas en algún momento, sólo recuerda exigirte tú misma.

1. Está comprobado científicamente que el 70 % de tus resultados dependerán de lo que comas y no de la cantidad de horas que pases en el gimnasio. Aunque intentes quemar 2 mil calorías diarias en la caminadora, si tu dieta no cambia no bajarás de peso.

Parte de los efectos secundarios, o bien, de los resultados a partir de ciertos cambios de hábitos o dietas, giran alrededor de tus características genéticas y de la edad que tengas. Si estás en los 20, los procesos para bajar de peso serán más sencillos y rápidos; en cambio, durante los 30 todo se torna más complejo y específico.