Noticias El Periódico Tarija

Después de la puja por ocupar el mercado central de la ciudad de Tarija en su nueva edificación, surgió también la controversia sobre cómo ocuparlo, es decir, el municipio pretendía que los comerciantes no sigan pagando un canchaje diario como había sucedido desde siempre. La posición de los vendedores rechazando el alquiler de los puestos fue firme y sin fisuras, los cálculos ediles salieron mal, se trataba de generar un ingreso que permita el mantenimiento de este centro de abasto en el que no se paga ni la luz, algo muy cómodo y muy difícil de soltar considerando la mala costumbre de tanto tiempo.

La historia de la construcción de este mercado en esta etapa es dramática, llena de problemas, al punto de estar terminado y no ser ocupado, multas de por medio a la empresa ejecutora y un sinnúmero de observaciones…al parecer todos olvidaron como estaban en la vieja infraestructura y se volvieron exigentes de la noche a la mañana. Lo cierto es que al parecer los comerciantes ganaron la pulseada a la alcaldía ya que se anunció que ingresarían el venidero mes de enero, se entiende que sólo pagarán el canchaje de siempre y no el alquiler que se pretendía, porque nadie más habló del tema. Al final un dolor de cabeza menos para Rodrigo Paz que ve como los conflictos aparecen como hongos a su alrededor, el último… con los de la feria navideña que tienen sus propias exigencias y presiones.

En el horizonte se ve un nuevo problema, se informó que desde el 2018 los vendedores de los diferentes mercados pagarán por el servicio de electricidad, lo que no nos parece mal, por el contrario, ya es hora, ya es hora de dejar de esperar recibir todo del estado y que los regalos nos caigan del cielo. Quisiéramos que fuese tan sencillo, que sólo sea disponer y ya está, no es así, con seguridad habrá resistencia, y de la tenaz, porque si reaccionaron con lo del alquiler sólo basta imaginarse lo que pasará con la obligación de pagar por este servicio. Es inaudito pero es cierto y es en base a esta realidad que una autoridad debe moverse y administrar la ciudad, con sus propios bemoles… será un problema duro pero ya no sólo con los comerciantes de un sólo mercado, sino de todos.