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La juez Segundo de Instrucción en lo Penal, Wiat Belzu, aceptó el viernes la cesación de la detención preventiva de la exministra de Desarrollo Rural y Tierras, Julia Ramos, quien cumplirá detención domiciliaria en la ciudad de Tarija.
«En la audiencia de consideración y cesación de la detención preventiva, la juez llegó a concluir que no existe ni concurre ningún riesgo procesal para Julia Ramos, eso motivó que puedan aplicar las medidas sustitutivas y cesar la detención preventiva», dijo su abogado, Paul Gutiérrez.
Explicó que Ramos, implicada en el caso de corrupción en el disuelto Fondo Indígena, debe cumplir la detención domiciliaria con salida laboral y presentar cuatro garantes solventes que tengan 50.000 bolivianos cada uno, arraigo y presentarse ante la Fiscalía de Tarija.
De acuerdo con el abogado su cliente enfrenta un proceso «injusto» por más de dos años.
Por su parte, Ramos dijo que está feliz por la decisión de la juez y anunció que en próximos días recuperará su libertad para regresar a su casa, a su chaco y estar con su gente y sus padres.
«Colaboraré con el Ministerio Público y sostengo que soy inocente, pero seguiré adelante. Extrañé mi vino y mis uvas», dijo cuándo retornaba al penal de Obrajes custodiada por los policías.
La exministra fue denunciada por aprobar ocho proyectos «fantasmas» en el ex Fondo Indígena que causaron un daño económico al Estado de 7,5 millones de bolivianos.